TERESA MALUF EXHIBE ‘404’ EN EL MUSEO EMILIO CARAFFA DE CÓRDOBA

En el proyecto expositivo de Maluf se conjuga el lenguaje de las obras tridimensionales con el formato instalativo. Con esto en mente, y la característica disposición espacial de la Sala 5 del Museo Emilio Caraffa con su gran altura, las obras participan desde su inmanencia en un diálogo con la circunstancia.

TERESA MALUF EXHIBE ‘404’ EN EL MUSEO EMILIO CARAFFA DE CÓRDOBA

En sí, las obras se presentan no solo como piezas sino como procesos que develan la gramática visual de la artista, incluyendo bocetos, material en bruto, piezas inacabadas, y más. Esta poesía de formas y formatos plantea entonces lo que la artista describe como “arquitectura imaginaria”, donde las obras se conciben como “habitantes geométricos” con identidades propias. Así, la muestra se compone a través de la generación de “varios recorridos posibles, con ritmos, descansos, idas y retornos, ángulos y perspectivas diferentes.” Gracias a estas disposiciones, y las variantes de luz y sombra, forma y mirada, las obras cobran entidades que se relacionan directa e internamente con los visitantes; no es accidental que las sombras y colores –o ausencias de- se traduzcan de la obra al piso, las paredes e incluso el techo.

 

Teresa Maluf se traslada por una búsqueda artística que invoca vida en todo su proceso de manera tal que la experiencia del espectador sea envolvente y al mismo tiempo refugiante de la cotidianeidad sofocante.

En palabras del curador, Dante Montich: En sintonía con lo contemporáneo, y desde la retórica de lo geométrico, el proyecto de Teresa Maluf apunta a desarrollos conceptuales en los que los límites entre diseño, arquitectura y objeto, entre materia, soporte y obra, o entre espacio y recepción son puestos en consideración… Para la artista, su mundo geométrico no es solo un ámbito de presencia formal, sino una metáfora del espacio humano, un entorno vital. La “presencia” de las formas, su dinámica e intensidad se potencian en el juego de relaciones que se da en el propio espacio, no ya como soporte, sino como territorio habitado.

La cualidad de objeto diseñado y construido pasa a la de sujeto  poseedor de un destino particular. Partícipe de ello, la experiencia del espectador es inmediata, visual y visceral; por lo demás es experiencia que no pretende reconfortar a la razón. La instalación no solo facilita un espacio de formas posibles, de formulaciones estéticas y de miradas relativas,  también promueve la reflexión sobre las estrategias del arte; éste sea, quizá,  su principal enunciado.”

Teresa Maluf (n. Córdoba, 1949) es arquitecta y artista visual. Como arquitecta desarrolló su profesión en su ciudad natal y durante ocho años en Maputo, capital de Mozambique.

Entre 2005 y 2010 estudió en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Córdoba y además se forma paralelamente en los talleres de Carlos Peiteado, Jorge Torres y Dante Montich. Realizó clínica de obra con Tulio de Sagastizábal, Irene Kopelman, Annanké Assef y Justo Pastor Mellado. Desde el 2009 se dedica sólo a la producción de obras de Artes Visuales. Ha recibido numerosos premios y distinciones, realizado numerosas muestras individuales y participado en muestras colectivas y ferias de arte.

Sus obras se encuentran en espacios públicos y privados, parques y museos y en colecciones particulares. En al año 2019, el gobierno de la provincia de Córdoba le encargó la obra SINCRONÍA: una escultura de 6 metros de altura y diámetro instalada en el Parque del Chateau de 14 donde actualmente funciona el Centro de Arte Contemporáneo.

 

 

404

Curador: Dante Montich

Hasta el 5 de junio

Museo Emilio Caraffa
Av. Poeta Lugones 411 -  Córdoba, Capital