ZMUD: DESPUÉS DE SIETE AÑOS, MÁS QUE UN CIERRE, LA CELEBRACIÓN DE UN CICLO

Desde el 17 de julio, ZMUD, la galería de arte contemporáneo que tanto hizo –y aun hace- por la escena del arte argentino, ya sea desde la profesionalización de artistas, como de la comercialización de obras, viste sus paredes con las obras de todos aquellos artistas que alguna vez pasaron por ella para cerrar una etapa. Larisa Luz Zmud, fundadora y directora de la galería lo describía con palabras sinceras en un mail que circuló por galerías y allegados de ZMUD, emocionando y haciendo reflexionar a todos sus lectores: “No planteo esto como un cierre, sino como una transformación para mutar a algo más acorde con la coyuntura real de la Argentina y su mercado del arte. No es un final, es un capítulo nuevo”. Es por esto que ZMUD se despide a lo grande a través de un intenso ciclo de dos semanas con charlas abiertas sobre coleccionismo, análisis de obras, feminismo, y todo lo que se pueda imaginar: por supuesto, coronándolo con una fiesta el sábado 28 en el propio espacio.

Ph: Matías Helbig

Con solo 25 años, Larisa Zmud y Natalia Sly fundaban Slyzmud en el corazón de Villa Crespo, siete años más tarde ya consagrada como una de las galerías de arte contemporáneo más relevantes de Buenos Aires, la galería que hoy solo lleva el nombre de ZMUD se despide o, mejor dicho, dice hasta pronto. En conversación con Arte Al Día, Larisa sostuvo que la decisión no se debe a un elemento específico del contexto económico, político, social, artístico o global, sino que a una sumatoria de todas ellas. “Como galerista me corresponde replantearme y repensar el rol que nos toca a las galerías hoy y  desmenuzar detenidamente la escena artística para ver qué pasa –explica Larisa entre fotografías de Miguel Mitlag y dibujos de Nahuel Vecino, y agrega-, siempre dejando de lado la hipocresía de que el mercado y el arte no deben ir juntos”.

Visto de esta forma, por un lado, el cierre de ZMUD aparece más como un cambio de aire, un paréntesis para ver cómo cooperar con la profesionalización del arte argentino y su repercusión en el exterior, misión que tienen todas las galerías de Meridiano.  Por otro lado, también surge como una metamorfosis en la carrera de una figura muy interesante para la argentina que es Larisa Zmud.

Cofundadora y miembro del cuerpo directivo de Meridiano, con solo 32 años, Larisa admite que el fin de este ciclo también es una exploración para cooperar con el arte local pero desde otro lado: “Cuando abrimos la galería con Natalia estas tenían un rol institucional que hoy, felizmente, ha sido ocupado por instituciones como la Universidad Torcuato Di Tella o el Moderno”, comenta Larisa y dice que en la actualidad uno se puede pasar días en la galería sin que nadie entre. En consecuencia, la curadora ve esto como una nueva oportunidad para aportar desde lo pedagógico, sobre todo centrado en rol de los espectadores. En este nuevo ciclo asegura que le gustaría formar una especie de colectivo de educación curatorial sustentado a través de proyectos y mecenazgos, o pertenecer a algún equipo curatorial importante de un museo, ya sea e la argentina o afuera.

Asimismo, con relación al contexto artístico local, Zmud reconoce que lo que necesita la Argentina son agentes. “Por suerte tenemos figuras como Inés Katzenstein, en el MoMA, por mencionar a alguien. Es precisamente eso lo que necesitan los artistas locales, una voz legitimadora que no venga de las galerías”. 

Colmado de emociones, el montaje de la galería que está en Bonpland al 721, cubre todo los ambientes del edificio. Casi como si se tratar de una casa de familia, los muros de ZMUD expresan los siete años vividos por un grupo de curadores, artistas, colegas, amigos y hermanos. Salón Smooth, como se titula este último período de dos semanas, es el reflejo de todo lo que representa ZMUD como galería y Larisa Zmud como una de las personas más comprometidas con la difusión del arte contemporáneo argentino.