“POLIFOTONÍA”: LA ANATOMÍA DEL SONIDO

En el Lab 3, sala de experimentación sonora del Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM), se exhibe Polifotonía, una obra experimental de la artista colombiana Alba Fernanda Triana. Visualizando el sonido, Triana hace mutar el lenguaje sonoro y lo vuelve otro, pero sin abandonar los rasgos esenciales de la música: tiempo, frecuencia, ritmo, forma, textura y densidad.

“POLIFOTONÍA”: LA ANATOMÍA DEL SONIDO

La instalación está compuesta por tres esculturas que evocan instrumentos musicales, cada una resaltando una cuerda, un afinador y un parlante. A través del parlante, una señal de audio excita la cuerda haciendo que se visualice una onda sonora muy simétrica que opera como una especie de lienzo donde se refleja la luz que constituye el principal material de la obra. Lo que simula un ejercicio de física, Triana lo vuelve arte: las frecuencias de sonido y la luz equivalen a la piedra o el yeso del escultor, y aire, conductor infalible para que se propaguen estos materiales, equivale al lienzo del pintor.

Explorando sobre esta frontera entre la práctica científica y el arte, Fernanda Alba Triana nos ubica en medio de una polifonía visual haciéndonos ver lo que vagamente oímos cuando salimos a la calle, escuchamos una voz o caminamos por el campo. Polifotonía, como bien expresa su nombre, materializa esos gestos genuinos de la naturaleza que, a nuestro oído pueden resultar imperceptibles e improbables, y los transforma en un discurso tangible y perceptible dentro de nuestra cultura visual.

Inaugurada el 6 de diciembre en el Lab3 del MAMM, la instalación sonora de la artista colombiana permanecerá en el museo hasta el 17 de este mes. Además de su cualidad estética, Polifotonía, de Alba Fernanda Triana, es la evidencia de cómo el arte contemporáneo logra reinventarse a diario sumergiendo su pincel en los diversos campos del conocimiento.