Exhibición y Performance-procesión de Manuel Mendive en el Frost Art Museum explora influencia africana

El renombrado artista cubano Manuel Mendive Hoyo presenta su exhibición, Things that Cannot be Seen Any Other Way: The Art of Manuel Mendive (Cosas que no pueden ser vistas de ninguna otra manera: el arte de Manuel Mendive) y una procesión performance única, “Water (Homage to the Waters)”/ Agua (Homenaje a las aguas), en el Patricia & Phillip Frost Art Museum de la FIU.

Exhibición y Performance-procesión de Manuel Mendive en el Frost Art Museum explora influencia africana

La exhibición que estará hasta el 25 de enero de 2014, ha sido curada por Bárbaro Martínez-Ruiz, director de Orbis Africa Advanced Research Center, del departamento de Arte e Historia del Arte de Stanford University.

Centrada en la Carrera de medio siglo del prominente artista afro-cubano, “Things that Cannot be Seen Any Other Way: The Art of Manuel Mendive” es la primera exhibición en los Estados Unidos que se focaliza en la incorporación a largo término de la cultura visual y material de la religión afro-cubana.

Nacido en 1944, Mendive asistió a la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro. Reconocido en la actualidad como uno de los más destacados artistas contemporáneos de Cuba y del Caribe, comenzó su carrera en los tempranos sesenta. Mendive abrió nuevos caminos yendo más allá de la dependencia de sus predecesores con las formas predominantes del arte occidental como el cubismo y el surrealismo e incorporando a su pintura elementos visuales enraizados en la religiosidad histórica Yoruba y en las tradiciones visuales del África occidental. Un sustancial cuerpo de literatura ha destacado las referencias religiosas en el trabajo de Mendive, y sin embargo es poco lo que se ha escrito del modo en que los temas Yoruba fueron incorporados en la subyacente filosofía artística y religiosa; omisión que esta exhibición busca remediar en parte.

La exhibición sigue los rastros de Mendive en sus dibujos, pinturas, esculturas y performances desde los tempranos 60 hasta el presente, con especial atención puesta en ciertos temas reiterativos que son comunes a lo largo de su obra, incluyendo religión, identidad y memoriam así como a la producción de los estilos en los cuales puede ser categorizada su obra. En la crónica de la iconografía del arte afro-cubano en conjunción con un examen de la influencia tanto de las prácticas artísticas occidentales como africanas en el arte cubano, la exhibición explora fenómenos de criollismo, hibridez y sincretismo a lo largo del siglo XX hasta el presente. También destaca el papel jugado por las políticas de identidad, raza y resistencia por los descendientes africanos en las obras de arte indígena.

Según Carol Damian, directora del Patricia & Phillip Frost Art Museum, “Manuel Mendive une el cuerpo del ser humano a la tierra que lo ha generado, y a las plantas y animales, al agua y al cielo, a la Madre Naturaleza en la cual él es una criatura entre criaturas, y en ella encuentra la razón y el tiempo y el espacio de su propia existencia. Es un concepto totalizante del arte en el cual lo pictórico se mezcla con el cuerpo y el alma para alcanzar un intense peso emocional, donde arte y espíritu reflejan armonía y paz del alma”.

En conjunto la exhibición incluye más de 50 pinturas de Mendive, 4 de sus esculturas y un tapiz junto con una instalación de máscara. Esta exhibición es un proyecto originalmente concebido por Los Angeles Department of Cultural Affairs en asociación con el California African American Museum, el Patricia & Phillip Frost Art Museum de la Florida International University, y Fundación Amistad.

La Procesión-Performance

La idea central de “Waters (Homage to the Waters)” –Aguas (Homenaje a las aguas), procesión-performance fue una reflexión en la importancia del agua para el desarrollo de las diferentes culturas y su presencia y simbolismo para las religiones africanas, asiáticas y occidentales hasta el día de hoy, destacando la necesidad de este elemento para asegurar la vida del hombre y la naturaleza; el agua como una energía central vital y como un elemento viviente y eterno. Así, intenta contar la historia del agua como un viaje que se desarrolla a través de una investigación relacionada con el sujeto desde diferentes ángulos filosóficos, religiosos, culturales y sociales proponiendo una visión antropológica que va más allá de la presencia del agua en una cultura específica, como podría ser la Yoruba y de este modo, va hacia la esencia del reino humano, de sus sentimientos e historias personales.

El performance-procesión comenzó en el patio del edificio Graham Center del campus de la FIU, donde un grupo de personas que estaban mezcladas en la audiencia contó la historia del agua con megáfonos para amplificar sus voces. Esas personas actuaron como los viejos trovadores que repetían historias, pero usando en este caso modernos medios de comunicación tecnológica. También había actores, bailarines y músicos que oían o leían esos textos durante la procesión en torno a una escultura, Aguas del rio, cubiertos por un tapiz hecho por el artista. El tapiz fue removido por los bailarines y la escultura fue llevada al interior del Frost Art Museum, y situada en una pared destinada para ese propósito.

La programación pública fue presentada por el Frost Art Museum en conjunción con el Isntituto de Investigaciones Cubanas y el Programa de África & Estudios de la diáspora africana de la FIU. Fondos para la exhibición y los programas han sido proveídos por Fundación Amistad; Cernuda Arte; Manny Kadre; PanAmericanArtProjects; la Farber Foundation; y el Departamento de Asuntos Culturales de la Ciudad de los Angeles .